Ya estamos de vuelta en Horsens, y sigue sin nevar.... así que no hay fotos de esto nevado, por el momento.
Que bien me ha venido este parón navideño y que ganas tenía de que llegara. Necesitaba volver a la tierra, ver el sol, volver a estar con mi gente y degustar la comida de la mama. Y es que después de tanto tiempo fuera de casa, todo te parece nuevo. Desde el más que conocido camino a casa, a los anuncios de la tele, todos nuevos y tan malos y cansinos como siempre (hay cosas que no cambian nunca).
Así que con las pilas cargadas, me dispongo a afrontar esta segunda etapa de la aventura danesa. Ahora tenemos por delante un par de semanas de exámenes. También tenemos la presentación y defensa de nuestro proyecto, ese casco revolucionario que cambiará la vida tal y como la conocemos.
El viaje de vuelta se hizo un poco largo. Cuando ya estábamos en la fila para embarcar, y las azafatas habían entrado al avión, nos avisan que por problemas técnicos, el vuelo se ha retrasado. Y al cabo de los minutos sacan las maletas del avión.... las azafatas salen, y el piloto detrás de ellas poniéndole el antirrobo y echándole la llave al avión, que se iba a quedar ahí aparcadito.
Nos avisan que otro avión procedente de Barcelona, será el que nos traiga a DK, así que levantamos el campamento y nos vamos a la otra puerta para finalmente despegar.
Por culpa de el retraso de más de una hora y media, al llegar a Billund, la combinación bus - tren, era horrorosa, pues a la hora de trayecto, deberíamos sumarle más de 2 horas y media esperando. Así que decidimos coger un taxi, aun a sabiendas de que nos saldría bastante más caro que el trayecto rutinario, pero de no ser así nos plantaríamos en casa a más de las 2 am. Por suerte en este país, abundan los taxis que son furgonetas con capacidad para 8 personas, y 3 taxis de estos que llenamos. (veníamos más de 20 en el mismo avión con destino Horsens). Tras unos 50 km y poco más de media hora de viaje ya estaba en casita, dispuesto a deshacer la maleta para guardar toda la comida que había traido. Y eso es lo único que he desecho de la maleta, sacar la comida. Así que después de día y medio, aún siguen en el suelo, abiertas a la espera de una reubicación de la ropa.
Y así es como se encuentra la nevera, después de vaciar las reservas mías y de Edu (hace falta grasa para sobrevivir al duro invierno dinanés xD)
Y por los fósiles encontrados en una excavación en el piso, no parece que se lo hayan pasado del todo mal durante mi ausencia.... Vosotros lo veréis como basura y que son unos cabrones por no tirarla, pero yo lo veo como un regalo de navidad, ya que la mayoría de esas botellas y latas (las bolsas de plástico están llenas de latas de cerveza) son dinerito fre$$$$co, solo hace falta llevarlas al super.
Pues me hasta aquí como ha sido la vuelta al cole, ya os contaré que tal han ido los exámenes (que ya por ahora he aprobado 2 asignaturas, con un 6 y un 7 respectivamente ^^)
Os mantendré informados de como se desarrolla el mes, y a ver si hay suerte me saco la espinita del no-viaje a Amsterdam con alguna otra salidita.
No te preocupes que ya nos escaparemos a Amsterdam ;) Loviuu!
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